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29/8/2023
Sin duda después de la pandemia de covid-19 cambiaron muchas cosas en el ámbito empresarial, la puesta en práctica del home office (trabajo remoto), y el horario flexible.
Si tu negocio o empresa te permite adoptar estas modalidades de trabajo, es importante comentarlo con tu equipo y establece una política en donde quede claro el objetivo; el alcance (se refiere a quién entre todo el personal puede tomarlo), y las responsabilidades de ambas partes, es decir, por parte de la empresa y por parte de los colaboradores.
No todas las empresas pueden hacer home office, y es entendible, cada una podrá establecerlo si así lo desea, ya que no existe una ley que te obligue a hacerlo; sin embargo, hoy en día es una tendencia y un plus para ciertas personalidades como diseñadores, creadores de contenido, y demás puestos en el área de mercadotecnia y comunicación, pues se ha convertido en un atractivo para que las personas decidan entrar a trabajar en una empresa.
Siendo pequeña o mediana empresa (pyme) puedes empezar con un día a la semana aplicar el esquema de home office (trabajo remoto) para tus colaboradores, estableciendo que el trabajo en casa será llevado a cabo con profesionalismo e integridad y, por supuesto, será importante determinar un horario de trabajo, confirmar que cuente con un lugar seguro y confiable para trabajar (con “un lugar seguro”, me refiero a que el equipo no se deje al alcance de niños o algún lugar vulnerable a robo), que el colaborador esté siempre disponible y puntual en cualquier momento que se requiera la atención de sus superiores, y no olvides verificar una buena conexión a internet.
Respecto al tema de horario flexible, también es un atractivo para el colaborador contar con dicha prestación, cada empresa podrá mantenerlo si se llega a un acuerdo de entrar media hora antes y salir media hora después del horario.
En particular, con cada uno de los colaboradores hay que conversar justificando el por qué se requiere un horario “establecido” flexible, esto siempre sin afectar a lo demás colaboradores que tengan línea directa, que no estén sujetos a una línea de producción.
En el entendido que a muchos empresarios nos cuesta trabajo comprender estas modalidades de trabajar, sin embargo estas acciones podrían tener beneficios como:
· Disminuir la rotación de personal.
· Aumentar la productividad.
· Lo más importante: retener y atraer talento a la empresa.
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