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México tiene la
oportunidad de atraer más de 100 mil millones de dólares en los próximos años
producto del nearshoring; sin
embargo, tiene que resolver varios aspectos para dar cabida a la inversión,
tales como mejorar infraestructura y garantizar el estado de derecho, entre
otros aspectos.
Así lo señaló el
director General Adjunto de Análisis Económico y Financiero de Banorte, Alejandro
Padilla Santana, quien puntualizó la relocalización
de empresas o nearshoring es un
catalizador importante para nuestro país, y es una oportunidad que vale la pena
entender con sus desafíos, pero sobre todo por las oportunidades para atraer empresas
que se encuentran en Asia.
Ante los socios de
Coparmex CdMx, el funcionario bancario destacó que si se aprovecha la
oportunidad del nearshoring, en los
próximos cinco años México podría obtener ganancias superiores a los 100 mil
millones de dólares.
Además, la vecindad
con Estados Unidos le da una ventaja competitiva para el comercio, que ha
mejorado desde que se aplicó el TLCAN en 1994 y recientemente con el T-MEC, por
lo que se estima que las exportaciones no petroleras de México serán de 35 mil
200 mdd anuales en los próximos 5 años, cifra que se potenciará con los 33 mil 600
millones de dólares producto del nearshoring,
En el sector
automotriz, explicó, existe una clara señal de potencial importantísimo como lo
determina el top five de inversiones en 2022, 2023 y lo que va de 2024
(cuadro adjunto), además de que entre las principales exportaciones mexicanas
están los autos con 9% de ellas, las autopartes con 7% y los vehículos pesados
con 6 por ciento. Más industrias como la de las computadoras con 8% y alambres
y cables con 3%, las cuales se encuentran liderando también al sector
exportador no petrolero.
Sin embargo, destacó
que para atraer la inversión extranjera de diversos sectores y que se ubique en
diferentes partes del país, hay que resolver varios cuellos de botella en el
país, como son la carencia de infraestructura, falta de acceso a agua y
electricidad, estado de derecho e, inclusive, hasta un escaso acceso a mano de
obra calificada en algunas regiones, además de las necesidades de logística, de
almacenamiento y de transporte, las cuales a la vez son un área de oportunidad
para los empresarios de las medianas y pequeñas empresas.
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