Los
aumentos en los precios de las gasolinas, en particular del diésel, representan
una presión para el sector industrial, y sin una contramedida por parte del
gobierno federal, aumentarán costos de producción con repercusiones para el
consumidor final, todo ello como consecuencia de la reforma eléctrica.
El
presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación
(Canacintra), Luis Espinosa Rueda, aseguró que hay preocupación entre los
industriales por los efectos negativos que pueda tener la reforma a la Ley de
la Industria Eléctrica (LIE), porque se podrían encarecer los costos para las
empresas. “(…) si sube la gasolina va a traer una presión en cuestión de costos
y en la economía que tendrá que reflejarse en aumento de precios o de costos de
fabricación y el producto final se verá impactado”.
En rueda
de prensa virtual este martes, dijo que la posibilidad de un aumento en los
precios de productos industrializados dependerá de los costos de los insumos y
de los traslados, ya que los energéticos son fundamentales en la cadena de
producción y distribución.
“Ahorita
llevamos ya una semana con el incremento de gasolina, no estamos viendo que
haya una contramedida por parte del gobierno federal si esto se mantiene tendrá
un impacto directo en todos los precios”. señaló.
Por el
momento no hay incremento en el costo del gas natural, luego del desabasto de
este energético el pasado mes de febrero, que obligó al paro parcial de
actividades en la industria de Puebla lo que representó pérdidas superiores a
los 2 mil 700 millones de pesos.
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