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Dirigentes
empresariales coincidieron en señalar que “hay que esperar” cómo resuelve
Volkswagen el problema que tiene en Estados Unidos, aunque no dejaron de
señalar posibles repercusiones negativas en la planta de autos que opera en
Puebla y en la economía local.
El
presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, Eduardo Solís Sánchez,
aseguró que el problema de “credibilidad de Volkswagen, solo compete a la empresa
y a Estados Unidos”, sobre la inclusión de un software a varios modelos versión
diesel para que alterar las emisiones de contaminantes de los autos en Estados
Unidos.
Al
respecto, el directivo de la AMIA, puntualizó que “es un tema de Estados
Unidos, habría que preguntarle al propio Volkswagen”.
Durante
breve entrevista en Puebla, Solis Sánchez se abstuvo de mencionar si la crisis
de credibilidad de la firma alemana tendrá impacto en México, en la producción
y exportación de vehículos.
Aunque
dijo que para este año tienen estimada una producción total de 3.4 millones de
autos de las diversas marcas y modelos, de los que 2.8 millones serán
exportados a diferentes mercados, y con ello se generan más de un millón de
empleos.
Esta producción “es un récord histórico” para la industria automotriz de México, dijo.
Afectará economía de Puebla
Por su
parte, el presidente de Coparmex-Puebla, José Antonio Quintana Gómez, calificó
de “grave” el problema que tiene la armadora alemana en Estados Unidos, pues ya
otros países empezaron a revisar los vehículos que le compran a Volkswagen,
para ver si también están alterados para disfrazar las emisiones de
contaminantes.
Aunque,
el dirigente patronal se negó a aventurar cómo le afectará esta situación a la
planta de VW en Puebla y por consiguiente a la economía local.
“Sentimos
pueden bajar ventas y producción. Pero, su visión (de la empresa) es más amplia;
la empresa hará algo para reconocer el problema, y resarcir el daño”, que
también le permita en el mediano plazo recuperar su lugar en el mercado.
Volkswagen
“es uno de los socios importantes de Coparmex”, desde hace más de cincuenta
años “la economía de Puebla gira en torno al dinamismo de Volkswagen. Hoy no
podemos entender la economía del estado sin la presencia de VW”, puntualizó en
entrevista con Balance Financiero.
Quintana
Gómez aseguró que ha hablado con directivos de VW de la planta en Puebla, y sin
decir nombres aseguró que “ellos (los directivos) también están desconcertados,
ni sabían que sucedía esto” de la alteración de motores diesel para controlar las
emisiones de contaminantes.
Incluso,
agregó, “ellos dicen que esos motores diesel vienen directo de Alemania, acá
(en la planta de Puebla) se reciben y ensamblan, y los autos van a Estados
Unidos. Pero, acá no se le metía mano al motor, eso nos dicen nuestros socios”,
concluyó el presidente de Coparmex-Puebla.
Fernando
Treviño, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, a pregunta expresa declaró
que “esperaremos los resultados de las investigaciones; esperaremos la
respuesta de las autoridades sobre lo acontecido en Volkswagen”.
Rehusó avizorar
si habrá un efecto negativo para la economía poblana y por supuesto para la
planta de Volkswagen en Puebla. “No me aventuro a nada, ni a decir si le pegará
o no a Puebla. No vale la pena poner más nerviosos a los mercados de lo que ya
están”.
Treviño
dijo a Balance Financiero que
esperará al resultado de las investigaciones en Estados Unidos y Europa, ver cómo
se comporta el mercado americano si baja o no la demanda de autos de la firma alemana,
para estimar si habrá o no alguna repercusión en la economía local.
Cabe
señalar que al menos el 25 por ciento del PIB del estado de Puebla es generado
por la actividad de Volkswagen y las empresas proveedoras de autopartes; además
que de la planta dependen directamente cerca de 16 mil trabajadores, de los que
unos 10 mil son sindicalizados.
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