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Ante el “preocupante” incremento en casos positivos y número de personas hospitalizadas enfermas de covid-19, el gobierno del estado de Puebla decretó continuar con la suspensión de actividades no esenciales, además conminó a la población a mantenerse en casa.
De acuerdo con el pronóstico de la Secretaría de Salud, si la tendencia se mantiene la próxima semana el sistema hospitalario estaría colapsado, pues se cuenta con 1 mil 389 camas y es factible que haya una demanda de mil 613.
Actualmente hay 1,007 hospitalizados, es decir están disponibles poco más de 300 camas, independientemente de que se requiere de personal y equipo para atender a cada enfermo.
Por ello este viernes el gobierno determinó prolongar por dos semanas mas el cese de actividades no esenciales, del 12 al 25 de enero, además que está prohibida la venta de bebidas alcohólicas de jueves a domingo en todo el estado.
Los restaurantes y cualquier negocio de comida solo pueden dar servicio para llevar o entrega a domicilio; en tanto que la industria puede operar solo al 30 por ciento de su capacidad.
Continúa el cierre de todo el comercio, ya sea negocios locales independientes o plazas comerciales.
La coordinadora de Protección Civil estatal, Ana Lucía Hill Mayoral, enfatizó que no se permitirá la instalación de comerciantes informales, y corresponde a los ayuntamientos vigilar que se cumpla esta restricción.
El gobernador Miguel Barbosa dijo que estas medidas están vigentes desde este viernes 8 de enero.
"Tenemos que quedarnos en casa, confinarnos, sé que lo podemos hacer. El llamado es a todo el estado de Puebla a recuperar la salud, lo necesitamos, por el bien de nosotros mismos", dijo.
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